La cirugía ortognática puede comportar cambios en la nariz que si no tenemos en cuenta pueden empeorar la estética. En cambio, un buen control de estos cambios y su planificación, pueden traernos cambios estéticos muy interesantes.

Caso: Antes y después con la cirugía ortognática

Una paciente con clase III esquelética, que había hecho tratamiento ortodóncico previo con exodoncia de premolares. La paciente no estaba de acuerdo con el resultado estético e inició un tratamiento combinado de ortodoncia y cirugía ortognática en la Clínica Birbe.

El análisis facial de perfil muestra una falta de soporte del labio superior, zona paranasal y malar debido a la hipoplasia maxilo-malar causante a su vez dela clase III esquelética. Existe un ángulo nasolabial ligeramente obtuso, con columela prominente y poca definición de la depresión supranasal. En perfil apreciamos un mentón hiperplásico verticalmente con una distancia aumentada entre borde incisal de los incisivos inferiores y mentón.

El análisis frontal es consistente con la hipoplasia maxilo-malar descrita en el análisis de perfil. Existe una mínima exposición de los incisivos superiores en reposo. No existen desviaciones de la línea media.

El tratamiento quirúrgico consistió en un Lefort I de 8 mm de avance, con colocación simultánea de prótesis malares para tratar la hipoplasia malar. Durante el Lefort I se realizó una septoplastia para evitar interferencias del septo con el maxilar y su subsecuentes desviaciones del septo. Se remodeló de forma agresiva la apertura piriforme a nivel de la zona de la espina nasal anterior para permitir un asentamiento pasivo del septo sobre esta estructura ósea, de forma que la falta de tensión en esta zona permitiera conservar el ángulo nasolabial preexistente. Se realizo una suspensión de la musculatura perinasal con una cincha nasal para reposicionar dicha musculatura perinasalmente y evitar un ensanchamiento excesivo de la base nasal. También se hizo una sutura de la incisión circunvestibular en V-Y, para tratar de aumentar la parte central del labio superior.

A nivel de mandíbula, se realizó una mentoplastia de reducción vertical de 3mm con ligero avance de 3mm.

Postoperatoriamente en el análisis de perfil se aprecia la mejora en el soporte del labio superior, zonas paranasales y malares gracias al avance maxilar y a las prótesis malares.

El ángulo nasolabial ha quedado conservado  de forma que no queda el aspecto de nariz “respingona”. El cambio a nivel de la punta nasal, que ha subido ligeramente marca más la depresión supranasal y disimula la cifosis del dorso nasal.

En el análisis frontal, se aprecia la mejora en el soporte malar y paranasal, la mayor exposición de incisivos superiores (4mm) y la reducción de la altura del mentón.

Obsérvese que la anchura de la base nasal ha quedado conservada.

Estos cambios son consistentes con el control de la zona nasal y del ángulo nasolabial logrado por las maniobra quirúrgicas empleados para este fin: remodelado de la apertura piriforme y espina nasal anterior, cincha nasal, septoplastia trans Lefort I y sutura en V-Y.

Los beneficios de la cirugía ortognática en la estética

La cirugía ortognática tiene como objetivo buscar la división y el reposicionamiento de los huesos maxilares para conseguir la alineación correcta de los dientes, por lo tanto su fin es funcional y estético.

Muchos pacientes necesitan recurrir a este tipo de cirugía para conseguir una sonrisa perfecta por lo que es normal que durante el procedimiento se tengan que realizar extracciones dentales, eliminación de hueso o tejido blando. Y es que este tipo de cirugía soluciona sobre todo problemas en la mordida que afean al paciente estéticamente consiguiendo así un perfil más adaptado a la sociedad actual.

Por lo tanto, se mejora significativamente la estética de barbillas en retroceso o demasiado protuberantes por desplazamientos de los maxilares inferior o superior.

Los resultados obtenidos son  claramente beneficiosos pero aunque hoy desde el blog hayamos querido centrarnos más en la parte estética, lo cierto es que la cirugía ortognática no puede entenderse sin la solución de la funcionalidad  bucodental. De esta forma, los pacientes consiguen una mejor armonía facial y pueden solucionar problemas de asimetrías maxilofaciales que provocan algunos síntomas secundarios.