El objetivo de la mandibuloplastia es cambiar la forma de la mandíbula para armonizarla con el rostro. Los ángulos mandibulares, el borde inferior o el mentón son las zonas que se remodelan con mayor frecuencia, aunque también puede reducirse su amplitud, adelantarla o retraerla. En cualquier caso, es una intervención ideal para conseguir un rostro más equilibrado.
Qué es y para qué sirve un mandibuloplastia
La mandibuloplastia es un procedimiento quirúrgico que remodela la mandíbula, corrigiendo desproporciones o asimetrías que pueden afectar a la apariencia facial o a la función mandibular.
Este procedimiento se utiliza tanto con fines estéticos como funcionales, cuando existen problemas de alineación de los dientes que afectan a la mordida o a la oclusión dental. Es una intervención altamente personalizada que puede realizarse de forma aislada o en combinación con otros procedimientos faciales, si se persigue una transformación mayor del rostro, como parte de una perfiloplastia por ejemplo.
Se aplica, así mismo, tanto para las personas que buscan una mandíbula menos prominente para dar una apariencia más suave al rostro como para las que aspiran a tenerla más fuerte. El procedimiento puede incluir la eliminación de hueso para reducir el tamaño o la colocación de implantes para aumentar su proyección.
La intervención consiste en realizar incisiones internas (intraorales) para acceder a la mandíbula. Dependiendo del objetivo, se usa una fresa o sierra quirúrgica para reducir o remodelar el hueso mandibular o implantes para aumentarlo. Y se ajustan los tejidos blandos para conseguir un contorno armónico.
Antes y después de una mandibuloplastia
Ten en cuenta que esta cirugía se realiza en el interior de la boca y que, por tanto, tras la intervención no habrá ninguna cicatriz externa, visible. También que la primera visita resulta clave para que médico y paciente intercambien información y opiniones. Explicar al especialista lo que se pretende conseguir es fundamental a la hora de que este diseñe la intervención adecuada en cada caso.
Lo segundo que has de saber es que, antes de llevar a cabo este tipo de remodelación, es imprescindible hacer un estudio fotográfico y un escáner facial del paciente. Gracias a este estudio personalizado y pormenorizado, podremos apreciar a la perfección tanto las zonas que vamos a tratar como las estructuras que hay que respetar, como puede ser el nervio dentario. Además, este estudio previo nos permite realizar una simulación para visualizar los cambios deseados.
Todos estos pasos previos garantizan un resultado exitoso. Es la mejor manera de definir con exactitud un plan de tratamiento exitoso. Solo una vez que el especialista y el paciente están de acuerdo, y se ha analizado el caso a fondo, procedemos a la operación.
Después de la intervención, la cara permanece inflamada durante unos días. No te preocupes, porque es una consecuencia normal de la intervención. Si sigues los consejos del especialista, reducirás los síntomas al máximo, tendrás un posoperatorio sin complicaciones y acelerarás considerablemente la recuperación.
La mandibuloplastia puede realizarse de forma aislada o, si se busca una mayor transformación facial, conjuntamente con otras intervenciones: de mentón (mentoplastia), nariz (rinoplastia), mejillas (bichectomía) o frente (frontoplastia).
Las ventajas: mejora estética y funcional
Estos son algunos de los principales beneficios que puede aportar una mandibuloplastia, tanto desde el punto de vista estético como funcional:
- Consigue una mayor armonía facial. Al corregir desproporciones, se obtiene un perfil más armonioso y equilibrado.
- Definición del contorno facial. Permite personalizar el contorno del rostro para hacer realidad las expectativas de cada paciente.
- Soluciona problemas funcionales. Puede ayudar a personas con dificultades para masticar o hablar correctamente debido a asimetrías o desalineaciones mandibulares.
- Resultados permanentes. Una vez realizada la cirugía, los cambios conseguidos son para siempre.
A consecuencia de todo esto y como hemos constatado con nuestros pacientes, quienes se someten a una mandibuloplastia se sienten mejor con ellos mismos, mejoran su autoestima y aumentan su calidad de vida.
Si estás pensando en mejorar la apariencia de tu rostro o las funciones de tu mandíbula, la mandibuloplastia puede ser la solución. En Clínica Birbe, te aconsejaremos y te ayudaremos. Puedes llamarnos al +34 932 124 737, enviarnos un whatsApp al +34 626852363 o escribirnos a clinica@birbe.org.
Artículo redactado por el Comité Editorial de Birbe