Salud, belleza y bienestar van de la mano cuando hablamos de cirugía estética facial. Por eso cada vez más personas acuden a ella para mejorar su apariencia y lucir la mejor versión de sí mismas. La blefaroplastia y la rinoplastia están entre las operaciones más habituales.
El estudio La realidad de la Cirugía Estética en España 2022, presentado por la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), recoge un aumento de las intervenciones de cirugía estética del 215% respecto al análisis anterior, de 2014. De media, se realizan en nuestro país más de 204.000 intervenciones al año. El 85% de quienes acuden a clínicas de cirugía estética facial son mujeres, frente a un 15% de hombres. Aun así, hay que matizar que ellos las frecuentan cada vez más.
Blefaroplastia y rinoplastia, entre las más demandadas
Entre las intervenciones de cirugía estética que más se realizan están las de mama y las liposucciones. Pero también ocupan un puesto destacado en el ranking la blefaroplastia, que busca rejuvenecer la mirada, y la rinoplastia, que remodela el aspecto de la nariz. Ambas disminuyen dos de los síntomas más evidentes del envejecimiento.
La blefaroplastia consiste en eliminar el exceso de piel en los párpados inferiores o superiores, y de paso solucionar problemas de visión, mientras que la rinoplastia busca resultados estéticos y también funcionales. Muchas personas la eligen para ajustar el tamaño y la forma de la nariz en función de sus deseos. Pero, además, puede corregir problemas respiratorios. En este punto, es recomendable la rinoseptoplastia ultrasónica que, además de ayudar a que el conjunto del rostro resulte más armónico y agradable, corrige el tabique nasal para mejorar la función respiratoria.
La intervención más solicitada para menores de edad es la otoplastia, que corrige la separación de las orejas, las llamadas orejas “de soplillo”.
Las razones tras el “boom” de la cirugía estética facial
No existe una única razón para explicar este auge. Repasamos las principales:
- Técnicas más seguras. Los avances médicos y las nuevas técnicas quirúrgicas han hecho que los procedimientos resulten más seguros y menos invasivos. La suma de una tecnología avanzada y equipos de última generación garantizan que las intervenciones sean más fáciles, las recuperaciones más rápidas y los resultados más naturales y duraderos.
- Mayor información y concienciación. La decisión de someterse a una operación de cirugía estética no debe tomarse a la ligera. Antes, hay que informarse bien y eso pasa por acudir a profesionales cualificados y con experiencia. Sólo ellos pueden recomendar la mejor opción en cada caso. Una decisión informada pasa por saber en qué consiste la intervención, qué resultados concretos aportará y cuánto durará la fase de recuperación.
- Fuera prejuicios. Hubo un tiempo en que la cirugía estética facial estaba bastante estigmatizada. Mucha gente la veía como un lujo reservado a una élite que cambiaba su aspecto cada dos por tres por mero capricho. Por suerte, hoy se acepta como lo que es: la posibilidad de librarse de complejos y redefinir la apariencia. En una palabra, sentirse alguien más seguro en la propia piel.
- También una cuestión de salud. En bastantes casos, pasar por el quirófano no sólo consigue mejorar el aspecto físico deseado sino también solucionar problemas de salud.
Gracias a todo esto, la cirugía estética facial se ha normalizado y popularizado. Esta parte de la medicina ha emergido como un referente para muchas personas. Cada vez más españolas y españoles optan por dejar de vivir acomplejados para lucir su mejor versión y sentirse bien consigo mismos.
Si quieres beneficiarte de lo que ofrece la cirugía estética facial, confía en profesionales. El doctor Joan Birbe, Cirujano Maxilofacial y Oral, diplomado por la AAOMS, y su equipo experto te ayudarán en lo que necesites. Llama al: +34 932 124 737, envía un WhatsApp al +34 626852363 o contacta con nosotros en clinica@birbe.org.
Artículo redactado por el Comité Editorial de Clínica Birbe
