Todos partimos de un total de 32 dientes en nuestra boca, pero no todos los mantenemos durante toda la vida.
Durante nuestra etapa infantil-juvenil, la pérdida de los dientes de leche es un proceso que se da de manera natural y, posteriormente, crecen nuestros dientes definitivos. No obstante, ya en la edad adulta, pueden darse diferentes situaciones que pueden provocar la pérdida de dientes.
Motivos de pérdida dental
Las principales causas de la pérdida de dientes son las siguientes:
Falta de higiene dental: Es importante mantener una higiene diaria de nuestros dientes definitivos para evitar posibles problemas como su caída. Si no se mantienen sanos, puede aparecer caries motivada por la presencia de placa bacteriana y, como consecuencia, que el esmalte se vea seriamente perjudicado.
Infección periodontal: puede aparecer una enfermedad que dañe las encías y el hueso en el que se sujetan los dientes. No causa dolor, pero el paciente puede observar que las encías comienzan a sangrar o bien que los dientes se mueven.
Accidentes: siempre cabe la posibilidad de que se sufra un accidente que provoque la pérdida de algún diente, aunque también es probable que los dientes se dañen por un mal uso, como por ejemplo al intentar abrir una botella.
Bruxismo: son 32 dientes para toda la vida, por lo que debemos ser cuidadosos con ellos y no someterlos a ninguna sobrecarga. Es importante evitar el rechinamiento de dientes para evitar un posible desgaste, fractura o incluso una pérdida.
Restablecimiento dental
Ante un caso como la pérdida de dientes, la buena noticia es que se pueden restituir. La colocación de implantes dentales es una buena opción para la rehabilitación oral. En un tratamiento como este, la finalidad no es solamente estética, sino también funcional: el objetivo es que el paciente pueda volver a verse con dientes y cumplan con su función. Eso sí, antes de tomar una decisión como esta, es importante visitar a un dentista y cirujano.
Además, para someterse a una cirugía de implantes, es fundamental disponer de la cantidad y calidad necesaria de hueso maxilar. En caso contrario, se necesitaría realizar injertos de hueso. Para ello, el paciente traerá un TAC para conocer la densidad y el grosor del hueso maxilar. De esta manera, se escogerá el implante más adecuado.
Los pacientes que se someten a una cirugía de implantes dentales en Clínica Birbe, deben saber que tratarán con un equipo de especialistas médicos liderado por el Dr. Joan Birbe, diplomado por el American Board of Oral and Maxillofacial Surgery y miembro de la EAFPS.